Desahogo muy positivo

Hace como 5 años o así mi madre le pidió a alguien un favor (una cosa muy tonta, sin importancia real, pero que a ella le hacía mucha ilusión). Personalmente creo que era algo muy fácil, pero también entiendo que la persona que debía hacerlo probablemente tuviera mil cosas y no era su prioridad satisfacer el capricho de una señora mayor a la que apenas conocía. Aunque mi madre durante mucho tiempo dijo "claro que lo va hacer, me dijo que sí..." yo lo tuve claro. No iba a hacer nada. Varias veces mi madre me decía "¿y no te ha llamado ni te ha dicho nada? Porque yo le dejé tu teléfono y tu mail para que pudiera..." y yo "no, mamá, no ha dicho nada, piensa que debe tener mil cosas en la cabeza", intentaba quitarle hierro al asunto pero me parecía cruel por parte de esa persona haber dicho que sí y luego no hacerlo, era jugar con la ilusión de una persona mayor. Llegó un momento en que mi madre dejó de preguntar y yo sinceramente ya me había olvidado del tema.

Hasta que hoy me llama alguien al fijo (nadie me llama jamás al fijo, salvo que sea propaganda...) y me dice "hola, ¿eres la hija de ....? Soy .... (que ni he sabido quien era, de entrada) ¿ella está bien? ¿sigue con vida?" y yo "sí, sí, está mayor pero está bien" y me dice "estoy aquí en tal sitio y tengo lo que ella me pidió ¿puedes venir a buscarlo? Si no, te lo dejo aquí y ya vienes cuando puedas..." y yo "sí, sí, dame 10 minutos y vengo". No me ha querido cobrar nada y se ha disculpado por la tardanza, dice que tuvo problemas personales y se había olvidado y hace unos días se acordó y se había sentido fatal por no haberlo hecho. Me ha confesado que tenía miedo de llamarle y que yo le dijera que mi madre había muerto.

He ido a su casa con la cosa y le digo a mi madre "te traigo una sorpresa muy grande, de algo que creo que ya pensabas que nunca ibas a poder tener y te hacía mucha ilusión, a ver si aciertas..." y mi madre ha dicho mil cosas menos ésa (por cierto, esto me ha valido para apuntarme mentalmente varias ideas para regalos jajajaja). Cuando se lo he enseñado, se ha emocionado tremendamente, hacía años que no la veía tan ilusionada, ha sido un momento precioso, la verdad.

Ya digo que la cosa material en si es una tontería alucinante, pero para ella ha sido algo totalmente hermoso.

Es una tontada, pero de verdad que cosas así me hacen pensar que es cierto que el ser humano es bueno.

Me apetecía compartirlo con vosotras porque últimamente siempre escribo para cosas malas... Una cosa buena que pasa, pues oye, vale la pena ¿no?

Me alegro por tu madre, y por ti, que el momento de dárselo ha de haber sido bien bonito.