Tareas del hogar, feminismo y otro cambio de ciclo

Esas situaciones son un gran aprendizaje para ellos y para nosotros aunque de entrada duelan y el primer impulso sea salir a cortar la cabeza a quien acorraló a nuestro cachorro. Aprendemos nosotras a estar en otro plano, un par de escalones más arriba hacia su independencia y dejarlos ir y dejarlos ser. Ya no estamos con ellos físicamente en todas partes ni en todas las conversaciones por lo que es inevitable que surjan cosillas y ellos tienen que ir aprendiendo a lidiar con ellas. Y muchas veces esas situaciones les hacen abrir los ojos a otras realidades que tal vez no habían visto. Siempre es bueno contemplar distintos puntos de vista. Y también es bueno para ellos resolver situaciones/discusiones/planteamientos sin que nosotras hablemos por ellos.
En cuanto al tema de las tareas es un tema muy subjetivo y de cada casa. Si vosotros estáis cómodos con vuestra distribución no hay más que hablar, y aunque de entrada es normal que te sintieses juzgada por cómo le estás educando, ese sentimiento es sólo tuyo, no pongas esa intención en los demás. Yo puse un desahogo en la cuarentena por el tema de las tareas. Me sentía poco menos que la criada de mis hijos y hubo que hacer reajustes. Nos pilló a todos con el pié cambiado y no eran sólo las tareas sino la situación. Ahora estoy más fuerte que en ese momento y aunque sigo exigiendo "mis mínimos" y ellos siguen intentando escaquear como buenos adolescentes ya no tengo ese sentimiento. Yo tengo chico y chica y creo que hace más y mejor él que ella. Ella por ejemplo no entra a la cocina por voluntad propia más que para comer, no le interesa para nada cocinar pero si tiene que hacer algo lo hace. Ninguno ponemos la lavadora como hobby, pero si saben hacerlo y lo hacen cuando toca pues ya está. Luego ya cada uno en su casa se organiza como quiere, con días fijos, con tareas fijas, haciendo lo que surja ...Mis hijos por ejemplo se organizan entre ellos cuando toca y uno cocina y la otra friega o recoge porque lo prefieren así y a mí me da igual quien haga que mientras lo hagan. Si yo no voy a comer y ellos se hacen su comida y dejan recogido me importa cero como se distribuyan las tareas. Normalmente de comprar me ocupo yo lo que no quita que un día vayan ellos a comprar algo, y de la ropa también me suelo ocupar yo (es de las tareas que más me gustan), pero si no está en el cesto no se lava; cuando la recojo y plancho hago montones y cada uno se lleva la suya, desconozco si la guardan en el armario o le hacen un cuadro. De vez en cuando cuando ordenan su habitación me llaman en plan, ven a ver, y ahí veo que saben doblar su ropa, ordenar el armario, hacer la cama y limpiar el polvo, les felicito y hasta la próxima. A sus habitaciones no entro y las zonas comunes cada uno recoge lo suyo. ¿es mucho, es poco? Depende de quien lo valore y en que momento te pille, hay épocas de hacerlo de buen humor, otras de escaqueo y otras a gritos pero se va haciendo. Yo a su edad hacía muchísimo más? pues sí, pero yo no tuve adolescencia y tampoco les deseo eso. Así que ahí andamos tratando de encontrar un equilibrio.